viernes, 28 de febrero de 2014

Tallarines de espinacas con almejas.

¡Los tiempos cambian!
Los hombres nos hemos vuelto muy romanticones.
En una cena en casa de mi amiga Terelu en Madrid el pasado día de los enamorados, uno de los invitados, estudioso del comportamiento humano de sus costumbres y sus miserias, nos comentaba que los estudios revelan que el hombre cambia su rol de duro por uno más sensible y romántico, necesita los besos y abrazos más que las mujeres y sufre en silencio esa necesidad de afecto y ternura. La mujer parece que evoluciona en el mundo profesional y político, toma las riendas del futuro de nuestros tiempos y relega su antiguo rol a los hombres.
¿Nos pasará como a los caballitos de mar?
Ellos eligen una pareja para toda su vida, cuando esta muere permanecen solos por un tiempo y después mueren también.
Al comienzo de los tiempos estos animalitos eran de lo más promiscuos, los machos eran unos rompecorazones navegando por esos mares, enamorando a sus pequeñas congéneres como si el mundo se fuera a acabar próximamente. Las chicas sufrían en mutismo su vocación de casanovas, criando a sus pequeños sin quejas y solas, salían adelante abnegadamente.
Nos convertiremos en caballitos de mar, ¿con la cabeza y el cuello de un caballo, la armadura corporal de un insecto, la cola prensil de un mono y la bolsa de un canguro?
Espero que no, que sepamos encontrar el equilibrio y no nos usen como pasa en otros países, que a estos animalitos los utilizan para combatir la incontinencia urinaria. ¡Bueno, algunos se lo merecen!

Esta receta es para todos los románticos... ¡la que nos espera amigos!

  



Ingredientes:
  • Tallarines de espinacas
  • Puerro
  • Ajos
  • Almejas
  • Aceite de oliva virgen
  • Sal, pimienta blanca
  • Perejil fresco




Como lo hacemos:
Lavamos las almejas con sal y unas gotas de vinagre, las salteamos con unos ajos picados, sal y pimienta, reservamos,
Salteamos los puerros cortados finamente con sal y pimienta en aceite de oliva, añadimos las almejas y salteamos un minuto.
La pasta la hervimos con sal en abundante agua, el tiempo depende del fabricante, servimos todo junto y al lío.





Espero que os gusten, a mi amiga Terelu le encantan.
¡Nos vemos el sábado?

domingo, 23 de febrero de 2014

Una ensalada templada de calamar y uvas.

Mi amigo Agustín al enterarse que estaba en Madrid trabajando, me invito a una cena de lo "más". ¡No te puedes imaginar quien va asistir, te va a encantar!
Verdaderamente fue una sorpresa, después de un día de negociaciones, la constructora  FCC cierra un acuerdo para vender el 6% de su capital social, al magnate Bill Gates en 113,5 millones de euros, “un pico”.
Eramos unos cuantos, cenamos en el restaurante Zalacain, una apuesta segura, a Bill le encantó, y lo digo porque me lo comentó personalmente. En una de las veces que se levantó al baño o con el teléfono se sentó a mi lado y estuvimos charlando sobre nuestras cosas... Parece que su hijo al igual que el mío practica el mismo deporte y a el le encanta cocinar, por lo que me pude lucir, gracias a su ignorancia sobre el tema, con todos los respetos.
Cuando llevábamos un par o tres de “chupitos” se puso a escribirme en unas servilletas unas cuantas reglas de vida para mis hijos, la verdad es que con esa filosofía no me extraña que haya llegado donde está.

Os comento lo que le dice a sus hijos:

La vida no es justa, acostúmbrate a ello.

Al mundo no le importará tu autoestima. El mundo esperará que logres algo, independientemente de que te sientas bien o mal contigo mismo.

No ganarás 5.000 € mensuales justo después de haber salido de la escuela, y no serás el vicepresidente de una empresa con coche gratis, hasta que hayas terminado el instituto, estudiado en la universidad y trabajado mucho.

Si piensas que tu profesor es duro, espera a que tengas un jefe. Ese sí que no tendrá vocación de enseñanza ni la paciencia requerida.

Dedicarse a servir una mesa no te quita dignidad. Tus abuelos tenían una palabra diferente para describirlo: le llamaban oportunidad.

Si metes la pata, no es culpa de tus padres, así que no lloriquees por tus errores; aprende de ellos.

Antes de que nacieras, tus padres no eran tan aburridos como lo son ahora. Ellos empezaron a serlo entre otras cosas, por pagar tus cuentas, lavar tu ropa sucia y escucharte hablar acerca de lo “super” que eres y lo pesados que son ellos. Así que antes de emprender tu lucha por las selvas vírgenes, contaminadas por la generación de tus padres, inicia el camino limpiando las cosas de tu propia vida, empezando por tu habitación, escritorio y tu armario.

En la escuela puede haberse eliminado la diferencia entre ganadores y perdedores, pero en la vida real no. En algunas escuelas ya no se pierden años lectivos y te dan las oportunidades que necesitas para encontrar la respuesta correcta en tus exámenes y para que tus tareas sean cada vez más fáciles. Eso no tiene ninguna semejanza con la vida real.

La vida no se divide en semestres. No tendrás vacaciones de verano largas en lugares lejanos y muy pocos jefes se interesarán en ayudarte a que te encuentres a ti mismo. Todo esto tendrás que hacerlo en tu tiempo libre.

La televisión no es la vida real. En la vida cotidiana, la gente de verdad tiene que salir del café de la película para irse a trabajar.

Sé amable con los más aplicados de tu clase ”los empollones”. Existen muchas probabilidades de que termines trabajando para ellos.

Después unos se fueron a bailar y los que al día siguiente trabajábamos o viajábamos  nos fuimos a dormir, yo con mis servilletas que comparto con vosotros.


Esta receta es para mi nuevo amigo Bill, gracias por los consejos en nombre de mis hijos.





Ingredientes:

  • Cogollos de Lechuga 
  • Uvas rojas
  • Tomate de ensalada
  • Champiñones frescos
  • Aros de Calamares
  • Aceite, sal y limón


Como lo preparamos:

Los calamares los freímos pasados por harina, cortamos los champiñones en rodajas finas, el tomate, y la lechuga.
Montamos el plato aliñamos con aceite sal y limón y sobre la ensalada los calamares y las uvas, listo.

Seguro que os gustará, a Bill le encantó, la anotó en una pequeña y curiosa libreta que lleva en el bolsillo trasero de su pantalón, donde anota todo lo que le parece curioso e interesante.

¿Nos vemos el sábado?

domingo, 16 de febrero de 2014

Pincho de anchoas y mozzarella.



¡No te pases con la cerveza!

Phil Koehler, estomatólogo de la universidad de Florida, explica como nuestro propio metabolismo junto a la química de nuestro cuerpo juegan un gran papel a la hora de saber si una persona en concreto atrae más a los mosquitos o no.

Parece que no solo nos afecta el beber cerveza para perder puntos y coleccionar multas, parece que el mundo nos lo pone cada vez más difícil a los que nos gusta este divino caldo, ahora los mosquitos, ¡si los mosquitos!

Parece que se demuestra que los mosquitos son capaces de identificar nuestro tipo de sangre debido a unas sustancias que genera nuestro cuerpo, y los consumidores de cerveza les resultan bastante atractivos para picarles y sacarles su sangre, se ensañan y aumentan sus ataques con la persona que la consume.

Es que no nos dejan disfrutar de ella, no quiero entrar en el juego de la similitud de la DGT y los mosquitos en cuanto a que nos chupan la sangre por la ingesta de cerveza, dios me libre, pero... que nos dejen un poco en paz.
¿Terminarán por quitarles puntos a los mosquitos si sobrepasan el nivel de alcoholemia al succionarnos?
Yo de momento, te invito a una cervecita bien fría con este pincho y que vengan los mosquitos que quieran.





Ingredientes:
  • Unas buenas anchoas
  • Mozzarella
  • Albahaca roja
  • Tomate fresco
  • Sal, aceite de oliva virgen





Como lo preparamos:

Cortamos el tomate y la mozzarella en rodajas. montamos el pincho con los ingredientes a gusto y las anchoas como terminación.
Ojo las anchoas son el secreto, estas no valen para nada, las compré en Mercadona como buenas y son bastante mediocres, eso sí las pague bien, metiditas en su frasco de cristal y todo, cuando las abres están pegaditas habilidosamente al cristal y dentro aceite, una estafa, pero bueno es lo que encontré, acostumbrado a las de "Lolín" de Santoña.




Espero que os gusten, suerte en la compra.
Nos vemos el sábado.

domingo, 9 de febrero de 2014

Berenjenas chinas con pavo.




Me llamó la atención en una conversación que se mantuvo en casa sobre un descubrimiento: Un dispositivo permite que los padres sientan los movimientos del feto en su vientre, al igual que la madre.
Mediante unos electrodos, se hace posible que los padres puedan compartir con las madres los movimientos del feto.
El invento ha sido desarrollado por un fabricante de pañales, consiste en un cinturón que transmite los movimientos que el feto realiza en el interior de la madre.
¡Que felicidad!
Y digo yo, no se le podría aplicar este invento, claro sí, adaptado, a los maltratadores, con un dispositivo en "sálvese la parte", para que cuando golpeen, insulten y maltraten a sus parejas, sientan con unos cuantos aumentos, la sensación de impotencia, el dolor y la angustia, la frustración y la pena que ellos hacen sentir.
Que se vean acosados por ellos mismos y que el dolor no les deje vivir en paz, quizá cambien su actitud.  Bueno,  espero que a alguien se le ocurra y que de una vez por todas cambien los roles del maltrato.

Esta receta se la dedico a esos ocurrentes genios que nos sorprenden con sus inventos.







Ingredientes:
  • Filetes de pechuga de pavo
  • Berenjenas chinas
  • Sal, pimienta y aceite de oliva

Como lo preparamos:

Fácil, pasamos los filetes, salados y salpimentados por la plancha, después la berenjenas dejándolas al dente, las abrimos como ves en la fotografía y las pasas un par de minutos más.




Sencillo verdad, lo podemos acompañar de una mostaza rica e incluso de mayonesa.

Bueno nos vemos el sábado, que llaman a la puerta.


lunes, 3 de febrero de 2014

Garbanzos con chorizo.

Me cuenta una amiga Brasileña que
Un tío suyo, agricultor jubilado de 90 años, Luiz Costa de Oliveira, ha tenido 33 hijos, fruto de su unión con su mujer, la hermana de esta y la madre de ambas en  estado brasileño de Río GrandeAdemás, Oliveira, había tenido 17 vástagos con su primera mujer.
Tras la muerte de su primera mujer, el galán se unió a María Francisca, que ahora tiene 65 años, quien le ayudó en la crianza de los menores y con la que tuvo otros 17 hijos.

La hermana de María Francisca y cuñada del campesino, Ozelita, solía frecuentar la vivienda conyugal para colaborar en las tareas domésticas y comenzó a mantener relaciones íntimas también con Oliveira, fruto de las cuales nacieron otros 15 niños, ¡vamos, de forma esporádica!


A la peculiar situación se sumó la madre de ambas mujeres, Francisca, de 89 años en la actualidad, con quien Oliveira tiene otro descendiente.
"Lo que mejor hizo Dios en el mundo fue la mujer", declara Oliveira, que además de los 50 hijos, aunque no todos lograron sobrevivir, tiene 100 nietos y 30 bisnietos.

Oliveira da a entender que puede tener más descendientes "por ahí" de los que no tiene conocimiento, porque siempre le gustó la compañía femenina.

"No sé decir el nombre de todo el mundo, pero sé que tengo muchos hijos, nietos y bisnietos esparcidos", agregó Oliveira, quien tiene repartida entre dos viviendas a su numerosa familia.

A pesar de su avanzada edad me cuenta mi amiga, que no fuma ni bebe desde hace 40 años, goza de una salud envidiable, no siente molestias ni dolores y asegura echar de menos sus días de labranza en la huerta y de conquistador fuera del campo.


Para que luego mi amiga Encarna me diga, que la historia de un familiar suyo era de libro.
Encarna, siempre hay alguien que nos supera, y lo que no sabemos... En todas las casas hay un rincón sin barrer  ¿verdad?





Ingredientes:
  • Un bote de garbanzos pre cocidos
  • 1 Cebolla mediana
  • 2 Ajos
  • Un pimiento rojo seco ( choricero)
  • Azafrán
  • 1 cucharada de tomate frito
  • 1 hoja de Laurel
  • Chorizo para guisar no picante
  • Aceite de oliva virgen
  • Sal y pimienta negra



Como lo preparamos:
Sofreímos la cebolla en cascos y los ajos sin pelar, le añadimos el pimiento choricero, el laurel y seguidamente los garbanzos y el chorizo, cubrimos de agua y lo dejamos hervir.
Le añadimos el tomate frito, una cucharada de aceite de oliva, salpimentamos y en 20 minutos están listos.
Están mejor de un día para otro 


Bueno estos garbanzos le vienen estupendamente a Oliveira, por eso de reponer fuerzas. Ahora ¿Quien se atreve a llevarle la olla al pájaro? en un descuido... te la lía.

Besos y nos vemos el sábado.